Dame COLOR
Hay vida más allá del blanco y de los tonos tierra, del sufridito beige, y también del gris cemento y el rosa empolvado que dominan la decoración mundial y se llevan los likes en Instagram. Reconozco que soy el menos indicado para hablar y recomendar tonalidades alternativas a la paleta tirana del mainstream actual: mi casa está recubierta de un gris platino, interrumpido solo por un sofá azul ultramar en el salón y las cortinas en naranja quemado del dormitorio. Tras escarceos juveniles con el añil (pinté yo mismo el parqué de mi primera casa con laca epoxi para barcos, acabé lleno de manchas imposibles de quitar y aquel verano los amigos me llamaban el pitufo), con el marrón arcilla (pobre cocina) y el negro pizarra en la sala de…