LA CARTA ESTOY A DIETA
Hace años que me cuido. Como menos y bebo mejor. Respiro profundo, escucho mi respiración y estiro a menudo. Escucho a John Coltrane, pero también me esfuerzo por desmadejar los textos laberínticos de Silvio Rodríguez. Cuando no como, escucho: música, conversaciones o a los taxistas y su crónica urbana. Me pierdo en la librería Visor cuando veo que se me desajusta el ralentí. Y si me desvelo, leo. Estoy a dieta de las pérdidas de tiempo y de la gente que me resta energía. Guardo silencio si no sé de algo y he decidido no interrumpir si creo que se más que mi interlocutor. Cuando entra un libro en casa, sale otro. Regalo flores. Descorcho vino y brindo por la vida, te sirvo el plato y recojo la mesa. Edito revistas…