‘IMPRIMID LOS MENÚS’, EL UNDÉCIMO MANDAMIENTO
Los otros diez ya te los sabes. Es un error otorgarle al teléfono tanto protagonismo durante la comida. El placer de comer solo, mascullando pensamientos, desapareció. Ya nunca se come solo, se come con el teléfono. Hay que ponerle freno al consumo de internet desaforado. Llegar a un restaurante y decidir qué pedir, con tu pareja, con tu socio, con tus hijos, con tu enemigo... es un momento de placer intelectual previo a la degustación. ¡Imprimid las cartas! Todo buen marino sabe que no puede confiar al cien por cien en el GPS, tiene que llevar a bordo sus cartas náuticas. Siempre ‘juzgué’ los restaurantes por la calidad de la impresión de su menú, por su diseño gráfico, por la elección del papel. Será porque la tinta me gusta tanto como…