A nuestros MAYORES
es nuestro pequeño homenaje. Nuestro sincero tributo. Nuestra oda a los que nos abrieron camino hace años. A los audaces que fueron el futuro y ahora son los que más sufren el presente. A los que han roto moldes, dinamitado estereotipos y demostrado que la edad va mucho más allá del carné de identidad. A los que llevan grabada en la mirada la historia de una vida, tatuado en cada arruga el peso del tiempo y esculpida en el alma la sencillez de los grandes. A los que nos han cuidado, querido y protegido y que ahora se derriten con nuestros hijos: se les iluminan los ojos cuando los ven desde el otro lado de la pantalla. A los luchadores que vivieron la guerra y la posguerra y que, con…