TENGO MALA FAMA
HIJA DEL DIABLO, prima hermana de la desgracia y emparentada con las plagas bibíblicas, la mala fama lo infecta todo. Se asocia su nombre a la desgracia, porque cuando nos referimos a la buena preferimos llamarla reputación. La fama, la mala fama, devora almas a diario. Y es de una voracidad insaciable. Celebridades, que ahora se llaman celebrities, sucumben una y otra vez a sus malas artes. A nuestros ojos parece que es el brillo del dinero el que les ciega, pero en la mayoría de las veces es el hecho de que les dejen de mirar como se mira a una persona normal el que los jode vivos. La maldición del éxito es que, cualquier persona que conozcas mañana, la fama hará que no te mire con el corazón limpio.…