TODO ES CUESTIÓN DE TIEMPO
Todos hemos fantaseado alguna vez con la idea de viajar en el tiempo. De niños quizás nos ilusionaba poder ir a la era de los dinosaurios, atestiguar los momentos más gloriosos de la civilización maya o ver en acción a los caballeros medievales. Ya de adultos fantaseamos con poder viajar al pasado y evitar mandar “ese maldito mensaje” a las 3 a.m. o con mejor haber ahorrado esa quincena en lugar de apostársela sin éxito a las Chivas en el clásico de clásicos… Por otro lado, por todos lados nos llegan recomendaciones como “tienes que empezar a pensar en tu futuro”, “no te aferres al pasado” o “tienes que aprender a vivir en el presente”, y ahí va uno tratando de hacer malabares existenciales cuando se entera de que para la…