EDITORIAL
No formes parte del caos Cuántas veces te has percatado del estrés que, como virus en el aire contamina e impregna a todas las personas, ya sea en la oficina o en cada parada obligada por los semáforos de tu trayecto al trabajo. Las horas pico de las avenidas más transitadas en una urbe como la capital mexicana parecen ser ya permanentes, un estatus normal, el andar siempre “a las carreras”. En definitiva no terminamos por entender cómo “fluye” esta ciudad (y la vida misma). La solución para muchos está en tocar el claxon una y otra vez, buscando agilizar las cosas, sin darnos cuenta que lo único que conseguimos es multiplicar el caos. ¿Cuál es la solución? Conectar tu mente, cuerpo y entorno. Aunque para muchos podría ser motivo…